Académicos del Laboratorio de Pruebas Ópticas de la Facultad de Ciencias Físico Matemáticas (FCFM) de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) buscan dotar a escuelas del nivel básico y medio superior de microscopios de bajo costo a través del reciclaje de celulares.
La idea surgió cuando Alberto Cordero Dávila, investigador de la FCFM y sus estudiantes pensaron extraer la lente de la cámara de un teléfono en desuso para utilizarse como lupa, luego de que uno de ellos fotografió a una pulga.
Luego de comprobar su funcionalidad, el académico buscó extender este proyecto a otras instituciones.
El programa Reciclando un celular para construir un microscopio escolar, logró fabricar en cuatro años mil 64, a partir de equipos de telefonía móvil que no se usan, un trozo de madera y un acrílico, los cuales permiten observar bacterias, células de alimentos, alas de mosca, etcétera.
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